La persona tiene patrones de comportamiento y pensamiento disfuncionales y poco saludables, interfiriendo en las relaciones personales y en su vida diaria.
A modo general no existe un tratamiento específico para las personas afectas de un trastorno de personalidad, sino que debemos ofrecer un tratamiento individualizado, integral y multidisciplinar para las personas afectas y sus familiares.
Cada persona es diferente y dependerá de su historia psicobiográfica, intereses, vivencias, etc… por lo que la intervención terapéutica suele variar en función de todas estas características que finalmente constituyen el carácter y personalidad de cada persona y eso lo tenemos siempre en cuenta en nuestra consulta. Si tienes alguna duda en particular, te animo a que consultes con nosotros. Te esperamos.
La persona tiene patrones de comportamiento y pensamiento disfuncionales y poco saludables, interfiriendo en las relaciones personales y en su vida diaria.
Los más habituales suelen ser:
La persona presenta una gran desconfianza y suspicacia con los demás reaccionando a veces de una manera hostil.
La persona suele funcionar de una manera dramática y exagerada.
La persona suele presentar pensamientos (obsesiones) y comportamientos repetitivos e indeseables que los impulsan a hacer algo una y otra vez (compulsiones) generándole sufrimiento.
La persona suele tener una dependencia hacia una tercera persona de la que busca sentirse protegido y cuidado.
La persona suele mostrarse introvertido y tímido en situaciones sociales con una excesiva sensibilidad al rechazo o a las críticas.
